Orlando, Fla.— La mala circulación puede notarse mediante una serie de síntomas diferentes. Cuando ésta causa una gran cantidad de malestar diariamente y hay posibles malas consecuencias es importante prestarle atención adecuadamente.

Los siguientes son algunos síntomas de mala circulación:

Manos o pies adormecidos.
Piel seca y uñas opacas.
Pérdida de cabello.
Los hombres podrían experimentar dificultad en tener o mantener una erección.
Si es diabético, los golpes y heridas sanarán y cicatrizarán más lentamente.

Para darles una idea, su cuerpo cuenta con algunos 60,000 vasos sanguíneos. Estos, junto al corazón y otros músculos componen el sistema circulatorio. Este conjunto de vías transportan la sangre a cada rincón de su cuerpo, pero cuando la circulación no es buena, se desacelera la corriente y se bloquea el flujo de sangre. Esto significa que las células de su cuerpo no pueden obtener el oxígeno y los nutrientes que necesitan.

Causas comunes de mala circulación

La falta de ejercicio puede producir como consecuencia, mala circulación. Esto no ocurre de la noche a la mañana pero usualmente comienza a sentirse lentamente. Sin embargo, usted puede mejorar esta situación relativamente rápido si decide hacer algo al respecto.

La obesidad — Comer de forma no muy nutritiva también puede provocarla, ya que la obesidad es una de las principales causas de la mala circulación.

Fumar — Siempre se ha asociado con problemas de circulación.

Asuntos relacionados al tipo de trabajo — tales como permanecer sentado frente a la computadora por tiempo prolongado y no tomar periodos de descanso de la posición varias veces o ejercitarse varias veces en la semana puede causar este tipo de problemas.

 

10 cosas que puede hacer para mejorar la mala circulación o prevenirla:

  1. Mantenga su presión arterial controlada. Cuando ésta se mantiene alta puede causar arteriosclerosis, que es una condición que endurece sus arterias e impide el flujo de la sangre. Usted puede usar uno de esos monitores caseros de presión arterial y tomársela al menos una a vez al mes para que se asegure de mantenerla (o al menos intentar) en los 120 sobre 80.
  2. Si fuma, haga todo lo posible por dejarlo.
  3. La nicotina afecta sus arterias y espesa la sangre haciéndola difícil de fluir.
  4. Manténgase hidratado.
  5. Aspire a tomarse al menos unos 8 vasos de agua al día como parte de su rutina diaria.
  6. Evite estar sentado por periodos largos ya que esto le hace daño a su espalda y a su circulación. Tome periodos cortos de descanso y hasta considere unos de esos nuevos escritorios que adaptan la altura para permitirle seguir trabajando aún cuando cambia de posición.Ejercicios de bajo impacto como el yoga pueden ser muy beneficiosos para el flujo sanguíneo, pero también otros tipos de ejercicios como correr, correr bicicleta, caminar y nadar pueden ser de mucha ayuda. Usted podría conseguir excelentes resultados haciéndolos por al menos unos 30 minutos durante 5 ó 7 días a la semana..
  7. Utilizar medias de compresión podría ayudarle como una alternativa, pero asegúrese de consultar con su médico primario el tamaño (largo) y la cantidad de presión que debería utilizar.
  8. Cuide su dieta y manténgase lo más que pueda en un peso saludable. Una buena manera de conseguirlo es consumiendo más legumbres y vegetales y menos carne, especialmente aquellas que son altas en grasas saturadas. También vigile la cantidad de sal que ingiere.Estimule su circulación aplicando leves masajes de forma circular en sus piernas, brazos y espalda baja.
  9. El agua tibia hace que las arterias y las venas se dilaten aumentando así el flujo sanguíneo. Un baño (de tina) tibio podría ser exactamente lo que “el médico le recetó.”
  10. Considere tomar algún suplemento de omega 3 o aumentar la cantidad de pescado que consume.